Sobre mí


Soy un apasionado del fútbol y me siento afortunado de poder trabajar en lo que más me
motiva.

Mi formación diversa, que abarca desde el análisis táctico hasta la
especialización en Big Data deportivo y tecnología aplicada al deporte, me ha permitido
desarrollar una perspectiva integral del juego, especialmente en este contexto de
constante innovación y transformación digital, tanto en el deporte en general como en el
fútbol en particular.

Lo que más disfruto de mi trabajo como analista es la observación
detallada tanto del rival, a nivel colectivo e individual, como el día a día en los
entrenamientos, donde busco ayudar a jugadores y equipo a mejorar constantemente.

Mis ganas de seguir creciendo, compartiendo y aprendiendo me mantienen en constante
evolución, siempre con el objetivo de aportar y recibir conocimiento futbolístico a
través de la observación de los verdaderos protagonistas del juego: los jugadores.

Mi enfoque del análisis del juego


Mi metodología se basa en un estudio integral del juego, partiendo de tres parámetros clave que nos permiten comprender cómo juega un equipo: Estructuración, Intencionalidad y Comportamientos.

1️⃣ Estructuración


Este concepto parte de un análisis estático del equipo. Es importante diferenciar la formación del sistema de juego. Desde la formación se derivan dos sistemas: el sistema ofensivo y el sistema defensivo. No se trata solo de identificar estos sistemas, sino de comprender cómo se desarrollan en las distintas fases estables del juego, tanto en ataque como en defensa.

 

2️⃣ Intencionalidad

Hace referencia a las intenciones tácticas, los medios y las finalidades dentro del juego de un equipo. Se analizan aspectos como:

  • Intenciones básicas en su modelo de juego.

  • Ritmos de juego y cómo los modifican.

  • Niveles de intervención de los jugadores.

  • Espacios de intervención preferentes.

  • Dinámicas y regularidades en el comportamiento colectivo.

 

3️⃣ Comportamientos


Derivado de la intencionalidad, este aspecto se centra en las conductas preferentes que los jugadores adoptan para generar ventajas en el juego. Se analizan elementos como:

  • Roles y funciones dentro del equipo.

  • Relaciones entre jugadores y sus distancias óptimas.

  • Trayectorias y recorridos habituales.

El análisis del rival (colectivo e individual)

Para mí, no es lo mismo analizar el modelo de juego de un equipo/rival que analizar específicamente al rival al que nos vamos a enfrentar.

Al estudiar el modelo de juego de un equipo, el objetivo es identificar patrones y situaciones recurrentes en su propuesta sin contextualizarlos en un escenario concreto. Se trata de comprender su identidad y su idea de juego global en los distintos contextos a los que puede enfrentarse.

En cambio, cuando analizamos al rival al que nos vamos a enfrentar, buscamos ir más allá de su funcionamiento general y centrarnos en qué nos hará a nosotros en función de quiénes somos. Este análisis se adapta al contexto del partido, considerando la interacción entre ambos equipos e identificando cómo el rival puede ajustar su planteamiento según nuestras características y posibles debilidades.

Este enfoque permite acercar el análisis al escenario real del partido, facilitando una preparación estratégica más efectiva y operativa.

Asimismo, al realizar un informe individualizado del rival, lo más importante no es simplemente describir al jugador, como haríamos en un informe para una secretaría técnica. Debemos centrarnos en qué necesita saber nuestro equipo sobre los jugadores rivales, priorizando la identificación de tendencias y comportamientos repetitivos que puedan ser clave para anticipar sus acciones durante el partido.